Para cumplir con la Ley de Memoria Democrática, el CEIP Carola Ribed en Cádiz tuvo que cambiar de nombre. Aunque se consideraron nombres de figuras influyentes como Almudena Grandes o Elvira Lindo, se decidió que el colegio llevaría el nombre de la persona clave para su futuro, María Valle, oriunda de Algodonales.
"Me ha dado mucha alegría. Esto no entraba en mis cálculos ni tampoco lo pretendía, solo quería que la enseñanza pública fuera de calidad. Es algo muy bonito y me llevo una alegría por las muestras de cariño de la comunidad educativa del Carola", añade María para el Diario de Cádiz. María luchó incansablemente con los padres de los niños de la época para mantener vivo el colegio y todo lo que significaba para ellos. Después de muchas incertidumbres y sombras, finalmente se cedieron los terrenos necesarios para la construcción de un nuevo proyecto que María y las familias habían estado solicitando.
Hoy, la valentía de María y su lucha se verán recompensadas. Pero la historia no termina aquí; José Valle, el padre de María, fue la persona que cedió el terreno donde ahora se encuentra el CRIPER de Madrigueras. Desde el pueblo de Algodonales, no nos queda más que expresar infinitas gracias por la labor que realizaron a favor de la educación. ¡Gracias por todo! ❤
Fuente: www.diariodecadiz.es
