Los participantes compitieron en cocina tradicional, cocina de innovación, pastelería y mejor encargado de sala.
Esta vez no ha habido suerte entre nuestros concursantes locales, pero ya llegará el momento del reconocimiento a su talento gastronómico.
En la modalidad de cocina tradicional, el premio fue otorgado al chef Víctor Alberto Heredia, de Grazalema, quien deleitó al jurado con un canapé de lengua estofada con boletus y emulsión de guisantes con aceite de oliva.
La categoría de cocina de innovación tuvo como ganador a Fernando Naranjo, de Catering Alpresa de Villamartín. En cuanto a la modalidad de pastelería, el premio fue para Santiago Moreno, de Confitería Juan Moreno, también de Villamartín. Por último, en la categoría de mejor encargado de sala, el galardón fue entregado a Miguel Rosado, del restaurante El Laurel de Ubrique.